La avena tradicional es un grano completo con textura más firme y mayor contenido de fibra. Perfecta para digestiones lentas y sensación de saciedad prolongada. Favorece el control del azúcar en sangre, te mantiene con energía y es rica en micronutrientes.
Ideal para preparar porridge y sumarle frutas o almendras.
Usala también en recetas de repostería como: galletas, muffins, pancakes.
También la podés remojar la noche anterior (“overnight oats”) con yogur o leche vegetal.
Convertí tus desayunos en rituales reconfortantes!
